Hoy he visitado el SIMO, la feria internacional de tecnología de España. La última vez que visité el SIMO fue en 2009, cansado de la tendencia de la feria y de la ausencia del espíritu con que se fundó. Ya en 2008, el SIMO se canceló por motivo de la crisis. Pero creo que hay otros motivos más sangrantes sobre la salud de esta feria, que en su día fue un referente y unía a tantos y tantos tecnólogos.